Atento A Estas 7 Señales Que Indican Un Consumo Excesivo De Azúcar

Desayunar un rico pan con mermelada, luego una inofensiva barra de chocolate en la oficina, un trocito de pastel con un café en la tarde y para no comer demasiado antes de ir a la cama, un yogurt con fruta para terminar el día. Una rutina alimenticia con la que muchos nos podemos sentir identificados.

Pensarás que solo los productos dulces contienen azúcar; sin embargo, también la contienen los alimentos procesados, como las salchichas, la fruta o vegetales en conserva, los chips de papas entre muchos otros más, contienen una cantidad excesivamente alta de azúcar añadida.

foto-1

Cuando consumimos más de lo que nuestro cuerpo necesita quemar, se convierte en grasa; y no solo hablamos de la que se almacena en esos lugares que detestamos al mirarnos en un espejo.

Llena nuestros órganos con grasa, haciendo más difícil que funcionen de manera correcta. El primer afectado es nuestro hígado.

Cuando los nutricionistas reconocieron los beneficios de la grasa, también notaron que el azúcar (y la sal) es un gran enemigo, aún más peligroso la grasa.

Estos siete síntomas podrían indicar de que estás consumiéndola en exceso y que es tiempo de tomar medidas.

1.- Cansancio

Aunque el azúcar llega a tu torrente sanguíneo de manera rápida y aumenta tu energía, no debes comer golosinas al despertar cada mañana. Porque después del aumento de azúcar, viene el “bajón de azúcar”, que te hace sentir más cansado que antes. Para evitar eso, te recomendamos que en el trabajo reemplaces la barra de chocolate por una manzana, que proporciona azúcar y la fibra suficiente para relentizar la digestión del azúcar y utilizarla de una mejor manera.

foto-2

2.- Dificultad para concentrarse

Si te cuesta estar concentrado después de comer y tu cerebro se siente un tanto nublado, puede ser debido a un consumo muy alto de azúcar. Los extremos altos o bajos en el nivel de azúcar en nuestra sangre pueden tener como consecuencia una discapacidad cognitiva, que incluso puede provocar depresión.

3.- Adicción al azúcar

Si consideras que el azúcar no es lo suficientemente dulce, quizás estás padeciendo de adicción al azúcar. El alto consumo de azúcar por un tiempo prolongado eleva tu nivel de tolerancia a la glucosa en el paladar. Con el tiempo, necesitas más y más azúcar para satisfacer tu ansiedad.

foto-3

4.- Ganar peso

Si sientes que la ropa te estrangula y al verte en el espejo notas unos rollitos que antes no tenías, el azúcar en tu dieta podría ser el responsable de que hayas subido unos kilitos. Todos sabemos que contiene gran cantidad de calorías; y son el opuesto a calorías buenas. El azúcar solo satisface tu hambre en un corto plazo, es más, provoca que sientas más hambre después.

Por eso, cuando las personas consumen comidas procesadas, sienten hambre mucho antes en comparación a cuando comen alimentos más naturales, cocinados en casa o sin azúcar.

5.-Los antojos

Cuando consumes demasiada azúcar, probablemente sentirás antojos con frecuencia. Eso se debe a lo adictiva que es el azúcar. Incluso se le ha comparado con la cocaína.

foto-4

6.- Más resfriados y catarros

Si haz sufrido de estados de gripe y resfrío de forma más habitual de lo normal, podría deberse a tu consumo de azúcar. El consumo excesivo de azúcar debilita tu sistema inmune, haciéndote más susceptible a las enfermedades.

7.- Problemas a la piel

El azúcar es difícil de procesar por nuestro cuerpo. Nuestra piel es comúnmente el órgano de último recurso, donde el cuerpo envía toxinas para eliminarlas; aunque no sea el método más eficiente. Debido a esto nuestra piel lucha contra el acné, los eczemas, la rosácea, o se torna demasiado grasosa o demasiado seca.

foto-5

No tiene nada de malo comer un dulce ocasionalmente, una barra de chocolate, un trozo de pastel o comida procesada. Sin embargo, lo que deberíamos consumir en mayor cantidad son alimentos naturales como vegetales, frutas, nueces, legumbres y granos enteros. También, lácteos y carne con moderación.

No es malo darse un gusto de vez en cuando pero no dejemos que sea lo principal en nuestra dieta.