Si te gusta un buen café -con rico aroma, concentración perfecta, bien tostado y fresco-, sabes que hay que tomarse su tiempo para disfrutarlo. Pero si eres fanático de esta bebida, también será lo único que te despierta en la mañana y lo que necesitas para comenzar el día con energía.
Y es complicado, cuando vas tarde, tomarse el tiempo de hacer un café y además de tomarlo con calma y sin quemarse. Pero a continuación te mostraremos una técnica que puedes implementar cuando necesitas que tu café se enfríe.
Es una idea muy simple: la próxima vez que te hagas café, reserva una cantidad y conviértela en cubos de hielo.
Junto con enfriar el café, el sabor se mantendrá (no estarás agregando agua, por lo que no resultará un americano cuando te serviste un espresso).
Mira este video explicatorio a continuación:
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