El camarón puede ser pequeño en tamaño, pero son enormes en términos de valor nutricional y de beneficios que nos ofrecen a nuestra salud. Es una excelente fuente de selenio que neutraliza los efectos nocivos de los radicales libres, que es la principal causa del cáncer y otras enfermedades degenerativas, tienen poca grasa y proteínas de bajas calorías, una porción de cuatro camarones tiene 23,7 gramos de proteína por 112 calorías, es una buena fuente de vitamina D. La vitamina D regula la absorción de calcio y fósforo, que es esencial para tener uno dientes y huesos fuertes.
Para que disfrutes de este alimento sin tener que pensar en la tediosa labor que implica pelarlos, te recomendamos una técnica con la que simplificarás este proceso y de seguro esto te animará a consumirlos más seguido.
1.- Lava los camarones en agua de la llave hasta que estén limpios.
2.- Comienza por pelar los camarones. Con un cuchillo, corta la cabeza del camarón y retira la cascara dura.
3.- Cerciórate de que no queden rastros de cáscara.
4.- Coloca el camarón bajo el chorro de agua fría.
5.- Con un cuchillo, realiza un corte en la parte superior del camarón
6.- Deja que corra agua, con esto, permite que se elimine el intestino superior e inferior del camarón (la línea negra).
7.- Prepara tus camarones con la receta de tu preferencia.
¿Se te hizo agua la boca al ver estos camarones?
