¡No Botes Tu Bandeja Para Hornear! Este Sencillo Truco La Dejará Como Nueva

Nada en tu cocina es eterno: los utensilios de cocina se van manchando y desgastando. Pero si tu bandeja de cocina está en los últimos días, por ejemplo, acá hay un truco que puedes usar para alargar su vida. Apenas necesitas un par de ingredientes caseros y listo: ahorrarás bastante dinero y podrás seguir utilizando tus ollas, bandejas y demás utensilios. Aprende cómo hacerlo a continuación.

Pero ojo: recuerda utilizar las instrucciones correctas para cada material.

bandeja horno 1

 

Para esa cristalería que es muy difícil de limpiar

Necesitarás:

  • Lavavajillas líquido
  • Bicarbonato de sodio
  • Agua
  • Papel aluminio
  • Un cepillo

bandeja horno 2

 

Las manchas en la cristalería se ven horribles y son muy difíciles de sacar, sin importar cuánto intentes limpiarlas. Pero no pierdas la cabeza y prueba lo siguiente.

Coloca un poco de bicarbonato en un pequeño recipiente, remoja el cepillo en lavavajillas líquido y luego en el bicarbonato. Después cubre la cristalería con la pasta resultante en movimientos circulares. Si el área que quieres limpiar es extensa, usa un pedazo de tela.

Deja actuar a la pasta por unos 20 o 30 minutos. Luego arruga un trozo de papel aluminio y frótalo para remover las manchas.

¡Problema resuelto!

 

Acero inoxidable

Necesitarás:

  • Agua oxigenada
  • Bicarbonato de sodio
  • Una esponja áspera

bandeja horno 3

 

Tan fácil como es ensuciarlo, es fácil de limpiar. Así funciona con el acero inoxidable.

Primero aplica una pequeña capa de bicarbonato en la superficie a limpiar, y luego un poco de agua oxigenada. Después, aplica una segunda capa de bicarbonato. Deja a la mezcla actuar por una hora o dos y comienza a refregar. Las manchas deberían salir rápidamente.

 

Aluminio

Necesitarás:

  • Agua
  • Vinagre blanco
  • Una olla de cocina
  • Una esponja

bandeja horno 4

 

Como es más barato que el acero inoxidable, el aluminio se ensucia más rápido. Pero con la técnica adecuada puedes alargarle la vida.

Mezcla agua con vinagre en partes iguales y hiérvelos en la olla. Cuando alcance el punto de hervor, retírala del fuego y déjala enfriar a temperatura ambiente. Remoja tu esponja en el agua con vinagre y limpia lo que desees limpiar. Cuando hayas terminado, enjuaga la olla con agua aliente ¡y listo!

 

¿Te gustó? ¡Compártelo!